El Grupo Municipal de Unidas por Mérida (Izquierda Unida-Podemos) ha presentado una moción para su debate en el próximo pleno, previsto para este miércoles 31 de marzo, por la que pide nombrar ’25 de marzo’ a la rotonda ubicada en la intersección entre la Avenida Adolfo Suarez con la Avenida Luis Jacinto Ramallo.
Esta propuesta pretende dotar de visibilidad a un hecho que entendemos de una relevancia histórica significativa, como lo fueron las ocupaciones de tierras llevadas a cabo por parte varias organizaciones campesinas, y que tuvieron lugar en Extremadura el 25 de marzo de 1936 y que constituyeron una de las acciones de protesta más importantes en la historia de nuestra región en defensa de la puesta en marcha de la reforma agraria, y que tuvo como uno de sus principales artífices a la Federación Nacional de Trabajadores de la Tierra (FNTT), la organización del campo adscrita a UGT.
El 25 de marzo de 1936, entre 60.000 y 80.000 campesinos, jornaleros o yunteros de la región protagonizaron la ocupación simultánea de 3.000 fincas de forma pacífica y sin incidentes, ni con los latifundistas ni con las autoridades allí situadas en más de 280 pueblos de Extremadura, iniciándose el mayor movimiento de protesta que ha conocido nuestra tierra, y sobre el cual ha valorado que es uno de los mayores hitos históricos de Extremadura.
La reivindicación de esta fecha y la apuesta por su recuperación histórica constituye un reconocimiento del compromiso de los campesinos extremeños por un reparto de la riqueza más justa y una organización de la vida pública dentro de los márgenes de la democracia y la participación, tal y como ponen de manifiesto el modo en el que se organizó y se ejecutaron las acciones que se llevaron a cabo en esa fecha, que constituye un hito en la historia del movimiento campesino extremeño y un claro ejemplo de su madurez, en contra de los tópicos que dibujan tradicionalmente al pueblo extremeño, y especialmente en el entorno rural, como un pueblo sumiso e indolente.
Para Unidas por Mérida (IU-Podemos), llevar esta propuesta al pleno persigue recuperar los hechos que tuvieron lugar en Extremadura el 25 de marzo de 1936 simboliza el orgullo, la dignidad, y la lucha del pueblo extremeño contra la explotación y contra la miseria a la que se le ha sometido históricamente; tal y como viene reivindicando la Asociación 25 de marzo y otros colectivos, que han llegado a solicitar la declaración del 25 marzo como el día oficial de nuestra comunidad autónoma.