Unidas por Mérida (Izquierda Unida -Podemos) exige al gobierno municipal que aclare cuál es la situación de la obra de rehabilitación del convento de las concepcionista, y las actuaciones realizadas tras el derribo de la cubierta producido durante el pasado mes de diciembre.
El derrumbe de la cubierta del Convento de las Concepcionistas que tuvo lugar durante el mes del pasado mes de diciembre ha producido la suspensión de la obra, sin que hasta la fecha el gobierno municipal se haya pronunciado sobre los efectos que este hecho pudiera tener en el futuro desarrollo de la obra.
Hasta la fecha, la información remitida por el gobierno municipal a nuestro grupo municipal, aborda la cuestión en tales términos que, muy a pesar nuestro, presenta más dudas que aclaraciones; y que se limita a un informe con una extensión no alcanza los dos folios.
Según las fuentes consultadas por nuestro grupo municipal, la intensidad de las lluvias que tuvieron lugar ese día en nuestra ciudad no pueden llegar a justificar el derrumbe de la cubierta del convento, pues, en ningún caso, alcanzaron una intensidad que no fuera equiparable a episodios de precipitaciones anteriores.
En estos términos, entendemos que resulta más razonable establecer una relación entre la actuaciones realizadas por la empresa responsable de la ejecución del contrato y el derrumbe de la cubierta, que intentar vincular este suceso con las precipitaciones producidas durante el día del derribo; sobre todo si tenemos en cuenta que nos referimos a un edificio que lleva en pie más de trescientos años, y que por tanto, ha soportado circunstancias climatológicas más severas en más de una ocasión.
Queremos señalar la enorme gravedad de los hechos descritos, y que podrían haber tenido consecuencias terribles si el derrumbe se hubiera producido durante un día laborable, y por tanto, con la presencia de los trabajadores en la propia obra durante el derrumbe.
Igualmente, debemos subrayar la falta de transparencia y la escasísima información facilitada al respecto, lo que nos empuja a desconfiar de la verdadera intención del gobierno de Osuna al respecto, que desde un comienzo se negó a autorizar la visita de nuestro grupo municipal a las obras, cuando así se solicitó.
Queremos recordar al gobierno municipal, el papel decisivo que la normativa vigente reserva al ayuntamiento como promotor de la obra, tanto en el control de la ejecución de la obra, como en la determinación de las responsabilidades que pudieran deducirse de la misma, por lo simplemente exigimos que las autoridades municipales hagan su trabajo y protejan los intereses de la ciudad.
Por todo ello, reclamamos al gobierno municipal que extreme el cuidado en la gestión de esta situación, aunque solo sea para evitar que esta obra no termine tal y como ha ocurrido con otras, como por ejemplo en la rehabilitación del Mercado de Calatrava, cuyo fracaso tuvo su origen en la incompetencia de este mismo gobierno.