Unidas por Mérida (Izquierda Unida – Podemos) exige al gobierno municipal el refuerzo de la plantilla y los servicios vinculados a la delegación de servicios sociales mediante la recuperación del Programa de Atención a Familias.
Los Programas de Atención a las Familias, se definen como el conjunto de actuaciones dirigidas a apoyar y ayudar a las familias en situación de crisis o vulnerabilidad social y/o familiar, potenciando las mejores condiciones posibles para la mejora de las relaciones y evolución positiva de las familias, como actuaciones ante situaciones de riesgo de menores y dinámicas de malos tratos en el seno de las mismas, así como mecanismo de detección e interlocución con los servicios sociales de atención social básica de aquellas familias, sobre todo en una época como esta, que necesitan acceder a recursos públicos para garantizar cubrir sus necesidades básicas.
En los últimos años, el gobierno municipal ha mostrado un interés decreciente por la prestación de este servicio a las personas más vulnerables, supeditando su continuidad a la provisión de fondos de programas autonómicos, mientras que otros ayuntamientos emplean fondos propios para dar continuidad a este servicio que consideramos esencial, como mecanismo para detectar y atender las necesidades de las personas que se encuentran en riesgo o situación de exclusión social, y que en estos momentos no existe.
Por ello, exigimos a la delegada de servicios sociales, y al conjunto del gobierno municipal, que inicie el proceso de selección del personal necesario para la puesta en marcha de este programa, que requería de la dotación de al menos personal titulado en psicología y trabajo social o educación social, así como la dotación presupuestaria que permita su puesta en funcionamiento.
Desde Unidas por Mérida, la confluencia local entre Izquierda Unida y Podemos queremos denunciar, que en un momento de crisis sanitaria como el actual, donde una de las medidas tomadas ha sido el cierre de Colegios e institutos , y cuya tareas de los técnicos de programa de familia ha sido considerada como esencial en otras localidades, por sus medidas de interlocutor entre colegios y familias donde no cuenten con medios técnicos o culturales suficientes para garantizar a los menores lo mínimo requerido en el sistema educativo.
En estos términos, la falta de iniciativa de la delegación de servicios sociales supone la supeditación de la prestación de este servicio a la realización de la convocatoria correspondiente por parte de la Junta de Extremadura, por lo que la falta de diligencia de las diferentes administraciones termina por recaer en perjuicio de las personas afectadas, una situación que no tiene lugar en otros ayuntamientos de nuestra región en los que la dotación de personal llega a dedicar una dotación permanente de hasta 16 profesionales sostenidos a través del presupuesto municipal.
El desmantelamiento del programa de atención a las familia en el ayuntamiento de Mérida, pone de manifiesto los criterios y prioridades de un equipo de gobierno que carece de la iniciativa suficiente para atender las necesidades de los más necesitados, y esto en un escenario de desempleo masivo y en el que la carencia de recursos podría ser resulta en parte con unos profesionales que dentro de su tareas fundamentales es trabajar -entre otras- las carencias económicas, educativas y laborales.